Sacrificada una ternera, se la desviscera, sala y se le cortan los cuernos. Luego se lo cose para que parezca entero.
Después se la echa en una zanja donde
solamente quedaban ascuas de leña que se hizo arder dos horas antes.
Se le pone una lata grande encima y se la tapa con élla, arrojándole encima ceniza primero y tierra después. Después de una hora se retira el animal totalmente asado